Debido a la pronta llegada del frente frío número 41, este fin de semana podría llegar una surada a la Península de Yucatán proveniente de las aguas del noreste del Golfo de México, por lo que se pronostica un fin de semana de puerto cerrado.
“Se está pronosticando un evento norte con rachas de 100 kilómetros por hora y durante el sábado en la noche, primeras horas del domingo, pudiera ingresar a la Península de Yucatán, todavía es un modelo de pronóstico, en las cuales está indeciso, pero aún así las previsiones se están dando”, detalló el meteorólogo de Solidaridad, Luis Antonio Morales Ocaña.
El meteorólogo de Solidaridad indicó que en el Golfo de México ya se están cerrando puertos por el frente frío, por lo que es probable que en Quintana Roo suceda lo mismo. Pero resaltó que antes de la llegada del norte, vendrá una surada con vientos de entre 30 a 35 kilómetros por hora.
“Para nosotros como es característico, antes de la llegada de un norte, ya tenemos la famosa surada. Vientos que se han registrado con rachas hasta de 30 a 35 kilómetros por hora, son efectos normales, y todavía estamos a la espera del comunicado de Capitanía de Puerto, que es el ente que da cierre y apertura de puertos”, explicó.
Al momento el mar está tranquilo y con banderín verde para que turistas y locales puedan disfrutar de la playa. El pronóstico para este sábado será de mucho calor y chubascos aislados.
“Tenemos mucha afluencia de aire marítimo tropical del Mar Caribe, con abundante humedad, tenemos la formación de nubes de moderado desarrollo, en los cuales en algunas ocasiones traen actividad eléctrica, lluvias y chubascos de forma aislada. Se nubla, hay claros en el cielo, sale el sol y mucho calor”, pronóstico el también funcionario adscrito a la Secretaría de Protección Civil.
Finalmente, los vientos de este fin de semana traerán arrastre de sargazo de manera intermitente.
“Es consecuencia lógica que estos vientos tienen un arrastre del sargazo que se encuentra en superficie marina. Desgraciadamente está llegando, no de forma persistente, pero sí intermitente”, concluyó Morales Ocaña.
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