Playa del Carmen.- Dos adultos y una menor de edad fueron detenidos esta tarde en el supermercado Bodega Aurrerá, del fraccionamiento Villas del Sol, acusados de realizar “robo hormiga”, presuntamente una actividad común para esta familia.
Este grupo de tres, además de una cuarta mujer y dos niñas, estaban en una de las cajas pagando un carrito con compras, pero fueron abordados con guardias de seguridad, y agentes de la Policía Municipal, pues en las cámaras habían detectado que uno de ellos, un joven de 18 años de edad, tenía mercancía escondida entre sus ropas.
Este sujeto trató de escapar y acabó lanzándole un golpe a uno de los policías municipales. En tanto, la menor de edad, de unos 16 años, trató de defenderlo y mordió a otro agente. Una de las mujeres también participó en esta pequeña riña, pidiendo que soltaran a su “sobrino”.
Acto seguido, la menor de edad, comenzó a llorar y a resistirse a ser llevada, lo que generó la inconformidad de los ciudadanos presentes, quienes comenzaron a reclamarle a los policías para que la dejaran ir y que no la maltrataran.
La adolescente comenzó a gritarle a la otra mujer, que no estaba detenida, a la que comenzó a llamar de “licenciada” y “abogada”, pero esta persona, de cabello rubio la ignoró y se siguió pagando la compra común, posiblemente para evitar ser implicada y detenida.
De acuerdo a los agentes, esta familia se dedica al narcomenudeo en la colonia irregular InHouse y ya en varias ocasiones han sido sorprendidos robando en tiendas o supermercados. Es probable que al llegar a esta sucursal, los guardias los identificaran y comenzaran a vigilarlos con las cámaras y al comprobar que estaban cometiendo robo, llamaron a la Policía para detenerlos en la línea de cajas.
Este joven de 18 años, quien según los uniformados tiene antecedentes penales en Cancún y Playa del Carmen, fue llevado detenido acusado de robo, además de agresión. La mujer que dijo ser su tía también fue detenida, acusada de agresión.
La menor de edad fue llevada por el Grupo Especializado en Atención a Víctimas de Violencia (Geavig), al parecer para recibir orientación.
Cuando esta adolescente ya estaba resignada y a punto de ser subida a una patrulla, la “licenciada” que hasta entonces la había ignorado de pronto reapareció y le dijo que se calmara, pues iría a la Fiscalía para lograr su liberación.
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