Diariamente, se observa claramente la falta de precaución de los motociclistas en Playa del Carmen dentro de las instalaciones de la Unidad Médica Familiar (UMF) del IMSS.
Este establecimiento de salud, que también brinda servicios a individuos con discapacidad, enfrenta continuamente las negligencias de aquellos que, ignorando las señales en azul que marcan las zonas exclusivas para rampas de discapacidad, deciden estacionar sus motos en estos espacios.
Esta conducta no solo causa inconvenientes, sino que también expone a peligros a los pacientes, forzándolos a navegar entre obstáculos innecesarios para ingresar a la clínica. Frecuentemente, tienen que realizar maniobras complicadas para acceder a la acera sin afectar las motocicletas estacionadas, pues sus dueños suelen acudir de inmediato a hacer reclamaciones.
Además, el problema se extiende a los espacios de aparcamiento destinados a coches, que son ocupados indebidamente por motocicletas. Esto complica la búsqueda de estacionamiento para los conductores, convirtiendo lo que debería ser una simple visita médica en un desafío no deseado.
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